
Una delegación compuesta por representantes diplomáticos de más de 20 países, incluidos Reino Unido, Francia, Canadá, Italia y varios Estados árabes, fue objeto de disparos de advertencia por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) durante una visita oficial al campo de refugiados de Yenín, en la Ribera Occidental ocupada. El incidente generó una fuerte ola de condenas por parte de gobiernos y organismos internacionales.
La visita, organizada para evaluar la situación humanitaria en la zona, fue coordinada con antelación, según el Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno Autónomo Palestino, que calificó el tiroteo como un “acto deliberado e ilegal”. En un video difundido en redes sociales se observa a los diplomáticos retrocediendo mientras se escuchan al menos cuatro disparos. Un integrante del grupo advierte: “¡Manténganse cerca del muro, manténganse cerca del muro!”, mientras se resguardan del fuego.
“El Ministerio responsabiliza total y directamente al Gobierno de ocupación israelí de este ataque criminal y afirma que tales actos no quedarán impunes”, declaró el organismo palestino.
Las FDI reconocieron haber realizado disparos de advertencia y aseguraron que el grupo “se desvió de la ruta autorizada y entró en una zona donde no estaba permitido el ingreso”. Agregaron que investigarán el incidente y se comunicarán con las delegaciones involucradas para presentar sus conclusiones. “Lamentamos las molestias ocasionadas”, concluyó el comunicado.
No obstante, el Gobierno Autónomo Palestino afirmó que la visita fue notificada con diez días de antelación y que la delegación permaneció al menos quince minutos frente a la puerta antes de que los soldados abrieran fuego.
Roland Friedrich, director del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas en la Ribera Occidental, refutó la versión de las fuerzas israelíes: “Este incidente es un duro recordatorio del uso laxo de la fuerza excesiva que las fuerzas de seguridad israelíes suelen desplegar en la Ribera Occidental, a menudo con consecuencias letales”.
Kaja Kallas, alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, calificó como “inaceptable” cualquier amenaza contra la vida de diplomáticos y exhortó a Israel a investigar lo ocurrido y garantizar rendición de cuentas.
El ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Antonio Tajani, convocó al embajador de Israel en Roma tras recibir información del vicecónsul italiano, presente en el sitio. “Las amenazas contra diplomáticos son inaceptables”, afirmó en X.
Francia, España, Irlanda, Bélgica, Eslovenia, Portugal, Alemania, Países Bajos, Noruega y Finlandia también condenaron enérgicamente el incidente. Asimismo, Jordania, Egipto y Turquía emitieron comunicados en los que denunciaron el ataque como una violación del derecho internacional.
“Este ataque, que puso en peligro la vida de diplomáticos, es una demostración más del sistemático desprecio de Israel por el derecho internacional y los derechos humanos”, señaló el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía. “Este ataque debe investigarse sin demora y los responsables deben rendir cuentas”, concluyó.