Entretenimiento
Trending

Nueva misión espacial buscará señales de vida en la atmósfera de Venus

En 2025, dará inicio la misión Venus Life Finder, un innovador programa de exploración espacial que analizará las nubes de Venus en busca de indicios de vida. Esta iniciativa, impulsada por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y la empresa Rocket Lab USA Inc., marcará el inicio de una serie de expediciones que se desarrollarán hasta 2041.

De acuerdo con Antígona Segura Peralta, investigadora del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, esta primera fase representa un paso clave en la astrobiología planetaria, al centrarse en el análisis directo de la atmósfera del planeta.

Un plan de exploración por etapas

El lanzamiento está programado para los primeros meses de 2025. La misión partirá a bordo de un cohete Electron de Rocket Lab, que transportará la nave Photon. Antes de llegar a Venus, esta liberará una sonda de aproximadamente 20 kilogramos, diseñada para descender en la atmósfera del planeta y realizar mediciones clave.

Uno de los instrumentos principales será el nefelómetro de autofluorescencia (AFN), que permitirá detectar materia orgánica y analizar la composición de las partículas en las nubes. Aunque la sonda solo operará durante cinco minutos, los datos obtenidos ayudarán a determinar si Venus podría albergar vida en su atmósfera.

A diferencia de misiones anteriores, que se enfocaron en cartografiar la superficie o medir la composición química del planeta desde la órbita, Venus Life Finder estudiará directamente las capas nubosas en busca de signos de habitabilidad.

El equipo detrás de la misión está liderado por Sara Seager, astrofísica del MIT, junto con Janusz Petkowski, especialista en vida en exoplanetas, y Pete Klupar, ingeniero con experiencia en misiones espaciales avanzadas.

Futuras expediciones y la búsqueda de respuestas

El programa contempla una segunda fase entre 2026 y 2031, en la que una nueva sonda con paracaídas transportará instrumentos avanzados para medir la acidez de las partículas, el contenido de agua y la presencia de metales. Además, se prevé el uso de un globo aerostático equipado con espectrómetros de masas y tecnología láser para el análisis directo de gases.

La tercera y última etapa, programada para 2041, buscará recolectar muestras de la atmósfera de Venus y transportarlas a la Tierra. Para ello, se utilizará un cohete de dos toneladas que enviará hasta 500 gramos de material desde una altitud de 60 kilómetros hasta la órbita del planeta, donde una nave espacial recogerá la carga y la traerá de regreso.

Exploración planetaria y el papel de Venus en la ciencia

Según Segura Peralta, esta misión y otras en curso, como Davinci, ayudarán a responder preguntas fundamentales sobre la evolución y habitabilidad de los planetas.

El posible hallazgo de compuestos orgánicos en un ambiente tan extremo como la atmósfera de Venus no solo revolucionaría la astrobiología, sino que también abriría nuevas perspectivas sobre la existencia de vida más allá de la Tierra y nuestra posición en el cosmos.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button