Hasta el 60% de los niños de nivel primaria en México y Centroamérica presentan dificultades que afectan su aprendizaje
No comprender lo que leen, tener una caligrafía defectuosa, excesivas faltas de ortografía y bajo nivel de atención son las dificultades que registra hasta el 60% de los estudiantes de nivel primaria entre los seis y 12 años en México y Centroamérica, lo que podría afectar su aprovechamiento y futuro académico, advirtió este martes el instituto educativo japonés Kumon.
La organización calcula que hasta seis de cada 10 alumnos de nivel básico, sin importar si son de escuelas privadas o públicas, acarrean deficiencias escolares que, de no atenderse, podrían poner en riesgo la formación universitaria de los estudiantes, con más del 30% de ellos que no la alcanzaría.
En este sentido, el vicepresidente para esta región del instituto, Felipe Cuellar, destacó que “nunca se hace urgente atender esta problemática en menores de 12 años que están teniendo dificultades de aprendizaje, aunque sus padres sí expresan preocupación ante esas deficiencias”.
El directivo también afirmó que incluso agarrar un lápiz y escribir le cuesta trabajo a la mayoría de los niños de entre ocho y 10 años de edad, y que, de cada 10 niños menores de 12 años, a ocho se les dificulta las matemáticas y a seis la lectura.
En México, la matrícula en las escuelas primarias asciende a poco más de 13.34 millones de niños, con una tasa de 95.1% de cobertura, pero que en la región lo superan Belice con 96.1% y Costa Rica con 96.4%, según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Nuevos retos
Kumon ha practicado más de 43 mil pruebas de conocimientos y habilidades académicas a niños de primaria en México y países de Centroamérica como Panamá, Costa Rica y Guatemala, para delinear planes personalizados de aprendizaje y generar alumnos autodidactas, después de que muchos vieron reducida su confianza y habilidades de estudio por el periodo de cierre de escuelas en la emergencia sanitaria de la Covid-19.
Estos estudios mostraron que el nivel de atención que hace cinco años se calculaba en aproximadamente 10 minutos, ahora ha descendido a un estimado de seis minutos.
Cuellar expresó que el mundo trae nuevos retos y, si bien las nuevas tecnologías y mercado laboral ofrecen oportunidades, es necesario tener las bases académicas para insertarse en la vida productiva y competir.
“Este es un tema que preocupa bastante tanto a padres como docentes y es fundamental impulsar la adquisición de hábitos y técnicas de estudio y la constancia en niños y niñas de primaria para que puedan afrontar los retos que traerá su inserción a la vida productiva”, comentó.
Por ello, “es necesario inculcar el autodidactismo, acompañado de disciplina, constancia y las habilidades para aprender”, añadió.
“Todos debemos comprometernos a apoyar los sistemas escolares con clases extraescolares para fortalecer las habilidades de estudio de los alumnos, que son un elemento esencial que necesitan para la vida y una profesión en la economía global”, concluyó el directivo.
Crédito: LATINUS