La audiencia incidental del juicio de amparo promovido para frenar la demolición de presones en el rancho “El Saucito”, propiedad del exgobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, se prolongó por varias horas luego de que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) presentara estudios técnicos con los que busca justificar la intervención.
Según fuentes del Poder Judicial Federal, tanto la parte que interpuso el amparo como la Conagua solicitaron la presentación de evidencia documental que será valorada por la jueza federal Madhay Soto, quien determinará si concede la suspensión definitiva. De otorgarse, esta medida frenaría cualquier acción por parte de la autoridad en el predio, al menos hasta que concluya el juicio. Hasta la noche del martes, la resolución no había sido publicada.
La jueza Soto previamente explicó los motivos por los cuales otorgó la suspensión provisional, destacando que la solicitud fue hecha por integrantes de una comunidad indígena en defensa de su derecho al acceso al agua.
“La demanda de amparo fue promovida por habitantes del ejido ‘El Trigueño’, quienes manifestaron ser de origen rarámuri y pidieron la suspensión para no ser privados del uso y disfrute del agua ahí almacenada, pues refirieron estar utilizando el agua para consumo humano, agrícola, ganadero y combate de incendios”, detalló.
La jueza también subrayó que la Conagua conserva sus facultades legales, siempre y cuando se respeten los derechos de los promoventes del amparo.
“En la resolución, de forma clara se estableció que la medida tomada no impide a las autoridades del agua ejercer sus facultades legales sobre los mantos acuíferos, siempre que garanticen el acceso al agua de los promoventes, ya sea en la forma en que se venía realizando o en una diversa”, puntualizó.
Soto concluyó que el objetivo del juicio de amparo es salvaguardar los derechos humanos frente a posibles actos arbitrarios de las autoridades, y que el proceso continuará conforme se analicen las pruebas presentadas por ambas partes.
