Representantes de Irán se reunieron este viernes en Estambul con funcionarios de Alemania, Francia y Reino Unido para discutir el estado de las negociaciones con Estados Unidos en torno a su programa nuclear. El encuentro se dio en un contexto de renovadas tensiones, mientras el presidente estadounidense Donald Trump instó a Teherán a tomar decisiones rápidas sobre el rumbo de su política nuclear.
El viceministro iraní de Relaciones Exteriores, Kazem Gharibabadi, informó que las conversaciones abordaron los avances en las negociaciones con Washington y un posible levantamiento de sanciones económicas. “Si fuera necesario, nos volveremos a ver para seguir con las conversaciones”, escribió en la red social X.
Las tres potencias europeas, junto con China, Rusia y Estados Unidos, firmaron en 2015 un acuerdo con Irán que limitaba su capacidad de enriquecimiento de uranio a cambio de levantar sanciones económicas. Sin embargo, durante su primer mandato, Trump retiró a Estados Unidos del pacto y reimpuso medidas punitivas, lo que llevó a Teherán a incumplir los compromisos nucleares asumidos. Actualmente, Irán enriquece uranio al 60%, muy por encima del límite del 3.67% establecido en el acuerdo. La fabricación de un arma nuclear requiere un enriquecimiento del 90%.
Desde Abu Dabi, última parada de su gira por el Golfo, Trump advirtió: “Ellos (los iraníes) tienen una propuesta pero, sobre todo, saben que deben actuar rápidamente o algo malo va a pasar”.
El jefe negociador iraní, Abás Araqchi, negó haber recibido una oferta concreta de parte de Estados Unidos. “No hemos recibido ninguna propuesta escrita de Estados Unidos, ni directa ni indirectamente”, aseguró en X.
Por su parte, Christian Turner, director de política del Ministerio británico de Relaciones Exteriores, indicó que las delegaciones “reafirmaron su compromiso con el diálogo, aplaudieron las conversaciones EE.UU./Irán en curso y […] estuvieron de acuerdo en reunirse de nuevo”.
Simultáneamente, el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, sostuvo un encuentro con asesores diplomáticos y de seguridad de Alemania, Francia y Reino Unido para tratar tanto el tema nuclear iraní como el conflicto en Ucrania.
En un texto publicado el domingo en el semanario francés Le Point, Araqchi advirtió a los países europeos contra una “estrategia de confrontación”. El canciller francés Jean-Noël Barrot advirtió en abril que si el programa nuclear iraní llegaba a amenazar la seguridad europea, “no dudarían ni un solo segundo” en reactivar las sanciones.
Aunque relegadas a un papel secundario frente a las conversaciones directas entre Irán y Estados Unidos, las potencias europeas evalúan activar una cláusula del pacto de 2015 que permitiría restablecer automáticamente las sanciones contra Teherán.
La reunión en Estambul tuvo lugar pocos días después de la cuarta ronda de conversaciones indirectas entre Irán y Estados Unidos, facilitadas por Omán.
Axios reportó que Washington entregó una “propuesta escrita” a Irán durante su más reciente encuentro. Por su parte, Trump aseguró desde Riad que ofreció una “rama de olivo” a los líderes iraníes, aunque señaló que la propuesta “no durará eternamente”.
La República Islámica insiste en que su programa nuclear tiene fines exclusivamente civiles. En declaraciones a NBC News, Ali Shamkhani, consejero del líder supremo Ali Jamenei, aseguró que Irán está dispuesto a comprometerse a no fabricar armas nucleares, eliminar su uranio altamente enriquecido, limitar el enriquecimiento a usos civiles y permitir inspecciones internacionales en sus instalaciones.
A cambio, exige el levantamiento inmediato de las sanciones económicas que actualmente asfixian a su economía.
