Operativo en Michoacán: fuerzas federales desactivan 17 explosivos ante el aumento de ataques con minas
En un esfuerzo por contener la violencia en Michoacán, fuerzas federales y estatales desactivaron 17 explosivos de fabricación casera en distintos puntos del estado, informó la Secretaría de Seguridad Pública. En los últimos tres meses, el uso de minas terrestres ha provocado la muerte de nueve personas, entre ellas cuatro militares y un menor de 15 años, en los municipios de Cotija, Apatzingán y Buenavista.
Durante las últimas 48 horas, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la policía estatal aseguraron seis explosivos diseñados para ser lanzados con drones en Santa Ana Amatlán, Buenavista, una zona donde opera el grupo criminal Los Viagras. Asimismo, desactivaron 10 artefactos en Apatzingán y uno más en Coahuayana.
El uso de explosivos en Michoacán ha dejado múltiples víctimas en los últimos meses. El 15 de diciembre de 2024, una mina terrestre detonó al paso de un convoy militar en Cotija, causando la muerte de dos soldados y dejando 10 heridos. Días después, el 17 de diciembre, otra explosión en Buenavista cobró la vida de dos militares más.
Los ataques con minas no solo han afectado a las fuerzas de seguridad, sino también a civiles. El 12 de enero de 2025, en Apatzingán, dos presuntos integrantes del crimen organizado fallecieron cuando su camioneta blindada artesanalmente fue destruida por un explosivo. Poco después, el 14 de enero, un maestro rural murió al estallar una mina mientras conducía por una brecha en la misma región.
El 9 de febrero, un jornalero de 15 años y un trabajador de 43 perdieron la vida cuando un artefacto explosivo detonó en una huerta de limón en Buenavista. Debido a la constante amenaza, habitantes de Tierra Caliente han colocado señales de advertencia en caminos rurales, marcados con tinta roja y calaveras para alertar sobre la posible presencia de minas.
Ante el incremento de estos ataques, un juez ordenó el 9 de marzo al gobierno federal desactivar las minas colocadas por el crimen organizado en las zonas donde ya se han registrado detonaciones.
