La jueza de control Guadalupe Patricia Juárez Hernández ordenó el cambio de medidas cautelares para los policías Juan Peralta Alavés y Carlos Guerrero Romero, acusados por la muerte de seis civiles y 27 heridos durante el operativo fallido en Asunción Nochixtlán, Oaxaca, el 19 de junio de 2016. Ambos podrán continuar su proceso en libertad tras haber permanecido más de dos años en prisión preventiva.
De acuerdo con la jueza, los retrasos en el proceso judicial no son responsabilidad de los imputados, quienes ahora deberán presentarse cada 15 días a firmar ante el juzgado. Además, se les impuso una multa de 20,000 pesos a Peralta Alavés y 10,000 pesos a Guerrero Romero, aunque no se detallaron los criterios utilizados para determinar estas cantidades.
El Comité de Víctimas por Justicia y Verdad 19 de Junio (Covic) criticó la resolución, señalando que los acusados han presentado múltiples prórrogas y recursos legales que han alargado el juicio. Las familias de las víctimas también cuestionaron que el caso haya sido calificado como “no complejo” por la jueza, pues consideran que esto contradice los años que ha tomado sin resolverse.
Santiago Ambrosio, dirigente del Covic, calificó la medida como un acto de protección hacia los acusados y advirtió sobre el riesgo que representa para las víctimas y testigos, al tratarse de mandos policiacos con experiencia y contactos que podrían utilizar para intimidar o agredir a quienes han exigido justicia.
La decisión, según el Covic, deja un precedente negativo para la impartición de justicia en Oaxaca y en el país, al priorizar la libertad de los acusados sobre los derechos de las víctimas de Nochixtlán.
