El icónico monte Fuji, conocido por su cumbre cubierta de nieve durante esta época del año, se enfrenta a una ausencia de nieve en noviembre por primera vez en 130 años, debido, probablemente, a las temperaturas inusualmente cálidas registradas en las últimas semanas.
Según informaron funcionarios meteorológicos, este fenómeno ha roto el récord previo establecido el 26 de octubre de 2016. La montaña, de 3,776 metros de altura, normalmente comienza a ver nieve en su cumbre alrededor del 2 de octubre, poco después de finalizar la temporada de senderismo de verano. En 2023, sin embargo, la nieve no ha llegado, lo que ha sorprendido tanto a expertos como a ciudadanos.
La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) señaló que en octubre, la temperatura media en la cima del monte Fuji es de menos 2°C (menos 28.4°F), pero este año se registró un récord de 1.6°C (34.9°F). Este aumento de temperatura, comparado con años anteriores, se debe al verano inusualmente caluroso y el otoño cálido que vivió Japón. Esta situación ha sido destacada por la Oficina Meteorológica Local de Kofu de la JMA, que, recordemos, anunció la primera nevada en el monte Fuji en 1894.
La ausencia de nieve en el monte Fuji no ha pasado desapercibida en las redes sociales, donde los usuarios han compartido fotos de la montaña sin su capa característica de nieve. La reacción ha sido mixta: mientras algunos muestran su sorpresa, otros expresan su preocupación sobre el cambio climático.
El monte Fuji, símbolo cultural de Japón, no solo es un Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, sino que ha sido un lugar de peregrinación y arte. Su figura ha sido inmortalizada en las célebres Treinta y seis vistas del monte Fuji de Katsushika Hokusai. Hoy, atrae a excursionistas que suben a la cima para ver el amanecer, aunque la creciente contaminación y el turismo masivo han generado preocupación y llamado a tomar medidas para proteger su entorno.